La función militar
La función militar está en el origen de muchos poblados y villas vascas a lo largo de la Edad Media.
Sin embargo, es preciso distinguir esta función, por un lado como defensa de la propia ciudad, y por otro como defensa de un territorio (ciudades fortaleza, ciudades guarnición y ciudades fronterizas).
En el primer caso se encuentran villas como Elgóibar, Zumaia, Larrabezúa, Rigoitia, etc., surgidas con el objeto de protegerse de maleantes y salteadores, así como de los Parientes Mayores en las guerras de bandos.
En el segundo caso los ejemplos son numerosos:
Vitoria, Laguardia y Salvatierra, en Alava; Puentelarreina, Etxarri Aranatz y Pamplona, en Navarra; Fuenterrabía, Villafranca, Segura y San Sebastián, en Guipúzcoa;Valmaseda y Orduña, en Vizcaya, y Bayona, en Lapurdi.
Etxarri Aranatz, situada a la orilla derecha del río Arakil, se edificó con fines militares, como defensa de la tierra contra los habitantes de la próxima alava, concentrando a los vecinos de la inmeditaAranaz en torno a la “bastida”, casa fuerte o torreón llamado Echerri.
Así pues la función militar está en el origen de Etxarri Aranatz y su situación estratégica para la función de defensa del territorio.
El plano de la ciudad
A través de los componentes históricos del plano podemos estudiar la localización de los edificios y la estructura social de las villas, así como su evolución.
En las villas de la primera época encontramos dos elementos morfológicos principales:
En primer lugar, la muralla, fundamental tanto para su defensa como para su conformación física e institucional y básica para su delimitación territorial.
Un segundo elemento presente en el paisaje, tanto urbano como rural, lo constituyen las iglesias.
J.I. Linazasoro diferencia los siguientes tipos de ciudades en el País Vasco:
- La ciudad camino (Burguete, Estella y Villabona).
- Ciudades de planta rectangular, totalmente fortificadas (Puentelarreina, Sangüesa, San Sebastián).
- Ciudades de recinto fortificado irregular con dos parroquias formando parte de la muralla (Laguardia, Vitoria, Salvatierra).
- Ciudades de una sola iglesia central (Mondragón, Azpeitia); a este tipo pertenecen la mayoría de las fundaciones guipuzcoanas.
Etxarri Aranatz sería del tipo de planta rectangular, totalmente fortificada.
Plano realizado por J.I. Linazasoro
Una amplia calle o paseo divide en dos partes la villa, formada por manzanas largas y estrechas, entre las que se abren algunas plazas y espacios libres.
Responde a una estructura de calles paralelas aunque dentro de una jerarquía original próxima a los ensanches de Vitoria: calles y caños.
Ya Caro Baroja reparó en la traza planificada de su planta y en las peculiaridades de su casco urbano. Todavía se aprecia, a pesar de las reconstrucciones, la posición ventajosa en la que se edificó esta villa, en un lugar alto, en el centro del valle y entre farallones montañosos, en el lugar por el que transcurría una calzada desde antiguo.
El núcleo se organiza en torno a una calle ancha que más parece una plaza de formato rectangular muy alargado, queda así dividido el núcleo urbano en dos partes más compactas a los lados de ésta: una al Oeste, pegada al río, otra al Este
En uno de los extremos se ubica la iglesia, mientras que en el otro se levantaba, con la misma función defensiva, una torre.
En su contorno se adivina aún el recorrido de la muralla.
A partir de esta plaza central el casco se distribuye en forma ortogonal, con algunas calles paralelas y otras transversales al modo de belenas.
Etxarri Aranatzek hainbat berreraikuntza izan ditu, beste hainbat hondamenen emaitza, beraz bere etxe gehienak zaharberrituak izan dira.Como se ha dicho, EtxarriAranatz ha sufrido varias reedificaciones, fruto de otras tantas destrucciones, y en consecuencia su caserío ha sido totalmente renovado. Son frecuentes las de los siglos XVII y XVIII, siguiendo a veces un patrón, de planta baja con puerta central, de arco de medio punto adintelado y una ventana a cada lado.
Sobre ésta, un piso con tres ventanas que corresponden a los huecos de abajo y algunas veces otro piso segundo de menor proporción, con una vertiente del tejado sobre esta fachada y sin huecos entre casa y casa, que forman manzanas compactas. A veces hay casas de dos huecos tan sólo y en determinados momentos se han levantado edificios públicos más amplios, como la casa municipal. Etxarri-Aranatz nos acerca, acaso, en su concepción a pueblos del Sudoeste de Francia, las «bastides» clásicas.
En la calle Mayor predominan las casas nuevas, aunque alguna procede de intensas reformas de inmuebles antiguos, y no faltan las que tienen cierto estilo. Llamaremos la atención sobre un bloque cúbico con tejado que vierte sobre la fachada, en sillar y abierto por vanos cuadrangulares salvo la puerta, que es de medio punto
moldurado. Lleva tres balcones por piso.
Parecen, en casos, obedecer a una planificación de manzanas enteras.
Delante de la iglesia hay una plaza, de la que sale la calle Maiza, donde llaman la atención las casas ocupadas por los números 10, 12, 14 y 16 que, aun no siendo iguales, muestran una coherencia y un mismo estilo. Van preferentemente en sillar, aunque alguna lleva las partes altas enlucidas, con tres alturas. La nº 10 lleva además una moldura que encuadra la puerta, de medio punto, y el balcón superior.
En la calle Elbegia anotamos el inmueble marcado con el número 6, con arco de medio punto moldurado y dos alturas más ático. Su fachada, de desarrollo horizontal, alterna sillar y mampostería.
En las calles Mundiño y Berjera las casas tienen un carácter más popular, con dos alturas. Debieron constituir las últimas líneas de construcciones antes de la muralla.
Cruzando la calle Mayor, la calle Dorremonea lleva a un edificio noble edificado en sillar, con la fachada recorrida por 2 impostas lisas y con puerta principal de medio punto bajo balcón con enmarques cajeados y alero moldurado.
Se construye en 1853 un nuevo ayuntamiento en la Plaza.
Memoria que se dirigió a la Diputación el 27 de enero de dicho año:
La Villa de Echarri-Aranaz con toda atención a V. E. expone que entre varias de las casas que se incendiaron en esta villa en la última guerra, se redujeron a cenizas la Casa de Ayuntamiento, donde también permanecía la cárcel pública, la escuela de niños con varios graneros, que se hallaban en otro local diferente y a pesar de la suma falta que le hacían a la villa suplicante estos objetos, sin embargo estos doce años ha seguido sin ellos;
pero no pudiendo continuar por más tiempo con esa falta, ha hecho reconocer al maestro arquitecto D.Anselmo Vicuña, el local destinado para tiempo de feria y según el plano que ha arreglado es capaz dicho paraje de hacer sin perjuicio del cubierto para el citado tiempo de feria una alhóndiga, cárcel, sala concejil, otro de ayuntamiento, secretaría, escuela de niños y habitación para el maestro, según que todo ello aparece del citado plano que se exhibe, habiendo asimismo arreglado el pliego de condiciones para las obras que se deben ejecutar, el así bien se exhibe.
En su vista la villa con su Veintena han conformado en realizar dichas obras conforme al mencionado plano y pliego de condiciones, según resulta del auto que end ebida forma se presenta; por lo que:
Echarri-Aranaz veinte y siete de enero de mil ochocientos cincuenta y tres. La Villa de Echarri-Aranaz y en su nombre su Alcalde Máximo Gayarre.
Una de las primeras construcciones de naturaleza academicista es el Ayuntamiento de Echarri-Aranaz,cuya ejecución se debe al arquitecto vizcaíno Santos Ángel de Ochandátegui verdadero introductor del academicismo en Navarra en el último cuarto del siglo XVIII y que ejecutó la fachada neoclásica de la catedral de Pamplona
Su fachada principal, trabajada en excelente sillar, participa de algunos de los postulados de Ventura Rodríguez, como el almohadillado del pórtico inferior o la articulación vertical de los dos cuerpos superiores
En el nivel inferior hay un pórtico compuesto por dos arcos de medio punto y tres vanos adintelados de gran tamaño. Unos y otros apean sobre pilares cajeados. El segundo piso lleva cinco balcones y el tercero otras tantas ventanas. Molduras lisas articulan la fachada y enmarcan los vanos, ordenando y jerarquizando el conjunto de manera racional. Sobre el alero hay una espadaña, flanqueada por pirámides, con frontón triangular partido que alberga un reloj y una campana. Una inscripción nos da cuenta de su restauración:
ESTE EDIFICIO SE / RESTAURO Y REFORMO / EN EL AÑO DE / GRACIA MCMXLVII.
Fachada del ayuntamiento
El 24 de octubre de 1861 se acuerda la construcción de:
“un juego de pelota tanto para largo como rebote y ble que hace mucha falta a esta indicada villa tanto para el entretenimiento y diversión del público como para su adorno, para lo que tiene un paraje aparente en terreno común ocupando parte de su plaza pública”
El ble o ple es una modalidad de juego a pelota arrojando ésta contra la pared.
El lugar que ocupaba este frontón se ve en el gráfico de 1883.
20 de mayo de 1868; el frontón estaba más al norte de su emplazamiento actual y también se vio afectado al Este por la nueva vía (desde Lizarraga) entre el Ayuntamiento y su pared izquierda.
El 2 de enero 1883, se vino abajo el frontón y se decidieron a rehacerlo en mejor sitio:
El derrumbamiento del juego de Pelota fue por el violento huracán del 2 de enero por la mañana.
En julio de 1884, todavía no están terminadas las obras del frontón y lo precisan para Septiembre, ya que del 10 al 14 se escogió a Etxarri como lugar para la celebración de las fiestas EUSKARAS.
Como se lee en el cartel del frontis; En 1894 se reconstruyó el frontón EUSKALERRIARI;
Frontón
Dimensiones: 43,85 m x 15,3 m
Pavimento: Hormigones y aglomerados
Cerramiento: Recinto cerrado
Iluminación: Permite el uso nocturno
Última Inspeccion: 07/03/2011
Actividad principal: PELOTA
Espacios complementarios
Vestuario Colectivo
Superficie: 22 m2
Duchas: 4
Lavabos: 2
Urinarios: 2
Inodoros: 1
Grada
Cubierta: Toda
Tipo de Grada: Fija
Plazas de Pie: 176
Plazas Sentados: 440